En 2001, Pro Mujer arrancó sus operaciones en México en la ciudad de Tula, en el estado de Hidalgo, en donde la marginalización de la población indígena impide que muchas mujeres microempresarias obtengan acceso a créditos y capacitación, entre otras herramientas de desarrollo.
A principios del 2002, Pro Mujer formó su primer grupo de mujeres empresarias locales, les otorgó su primer préstamo e impartió capacitaciones financieras.
Pro Mujer apoya actualmente a más de 40 mil mujeres en más de 300 municipios dentro de seis estados, incluyendo Veracruz, Estado de México, Ciudad de México, Puebla, Hidalgo, Querétaro.
En 2001, Pro Mujer arrancó sus operaciones en México en la ciudad de Tula, en el estado de Hidalgo, en donde la marginalización de la población indígena impide que muchas mujeres microempresarias obtengan acceso a créditos y capacitación, entre otras herramientas de desarrollo.
A principios del 2002, Pro Mujer formó su primer grupo de mujeres empresarias locales, les otorgó su primer préstamo e impartió capacitaciones financieras.
Pro Mujer apoya actualmente a más de 40 mil mujeres en más de 300 municipios dentro de seis estados, incluyendo Veracruz, Estado de México, Ciudad de México, Puebla, Hidalgo, Querétaro.