Red Argentina de Ambiente y Desarrollo

Principios de la RAAD

La RAAD se propone promover y realizar acciones tendientes al DESARROLLO SUSTENTABLE considerando imprescindible un abordaje desde la INTERACCIÓN y la COMPLEJIDAD en base a la ECOLOGÍA INTEGRAL. Hemos sido inspirados y guiados por los conceptos de Laudato Si', la encíclica del papa Francisco sobre el cuidado de la casa común, apoyados en el conocimiento y la búsqueda del bien común.

DESARROLLO SUSTENTABLE: Implica la intersección en la cual la humanidad se desarrolla integral y solidariamente, considerando la economía, el ambiente y la sociedad. Incluye la solidaridad intergeneracional y es incompatible con la cultura del descarte. Sólo será sustentable el desarrollo, si es integral y solidario. El mercado por sí mismo no garantiza el desarrollo humano integral, la inclusión social, la equidad o la protección del ambiente. El avance de la ciencia y de la técnica no equivale al avance de la humanidad. Se requiere un sistema normativo que asegure la protección de los ecosistemas naturales y sociales. Se requiere también, modificar los modelos de producción y consumo presentes, redefiniendo el actual significado de progreso y calidad de vida, teniendo la valentía de advertir la realidad de un mundo limitado y finito, deteriorado por un antropocentrismo desviado.

INTERACCIÓN Y COMPLEJIDAD: Tanto el ambiente como el desarrollo requieren abordajes complejos, lo cual exige diálogo transdisciplinar, interreligioso, entre ciencia y religión, ciencia y sociedad. Es necesario poner en diálogo, además, los saberes científico técnicos con los saberes populares. Exige, por otra parte, debates abiertos, transparentes, honestos, participativos, informados, inclusivos, respetuosos de la diversidad de opinión, que tengan como objetivo primordial el bien común y como reglas de conducta, los valores éticos y de la fe en un sólido diálogo interreligioso y entre fe y razón. La fragmentación de conocimientos suele llevar a perder el sentido de la totalidad y de las relaciones entre las cosas.

ECOLOGÍA INTEGRAL: La preocupación por la naturaleza, la justicia con los pobres, el compromiso con la sociedad y la paz interior, son inseparables. Todo está conectado. El clima es un bien común y uno de los principales desafíos para la humanidad. El agua potable y segura es un derecho humano básico, fundamental y universal. Todas las criaturas están conectadas. Cada una tiene una función. Ninguna es superflua.  Se debe tener en cuenta la naturaleza de cada ser y su mutua conexión en un sistema ordenado. Todos nos necesitamos unos a otros.  El ambiente es un bien colectivo, complejo, esencial para la vida, patrimonio de toda la humanidad y responsabilidad de todos. Es indispensable incorporar el valor del trabajo como ámbito de múltiple desarrollo personal. No podemos entender la naturaleza como algo separado en la economía, ni en la política, ni en la cultura, ni en nuestra vida cotidiana. La ecología integral es inseparable de la noción de bien común.

Nuestro Llamado

"Ante el desafío urgente de proteger nuestra casa común" (LS 13), la RAAD, integrante de la RELAI, hace un llamado a quienes se sientan comprometidos con nuestro principios, a "reconocer cuál es la contribución que cada uno puede aportar" (LS 19)… para participar en "un nuevo diálogo sobre el modo como estamos construyendo el futuro del planeta." (LS 14). "La gravedad de la crisis ecológica nos exige a todos pensar en el bien común y avanzar en un camino de diálogo que requiere paciencia, ascesis y generosidad." (LS 201)

<img data-idealist-editor-upload-provider="uploadcare" data-idealist-editor-upload-uri="http://www.ucarecdn.com/bdf953b0-5b9a-4103-80b6-35595ac8bb69/" src="http://www.ucarecdn.com/bdf953b0-5b9a-4103-80b6-35595ac8bb69/-/resize/775x/">