Gimnasia para la compasión y la felicidad
Del mismo modo que hacemos ejercicio para mejorar nuestro estado físico o vamos a la universidad a aprender una disciplina en particular, la compasión y la felicidad pueden ser desarrolladas a través del entrenamiento mental.
Matthieu Ricard biólogo y budista francés ve la compasión al igual que a la felicidad como un sentimiento el cual mediante el ejercicio mental constante puede convertirse en nuestra naturaleza pura; es decir, llegar a ser parte intangible de nuestro ser.
Estos son algunos puntos a resaltar de varias de sus presentaciones respecto al tema:
- A través de la meditación aprendemos a centralizar nuestros pensamientos y sentimientos logrando una conexión más profunda con nuestro ser y respondiendo mejor a nuestro entorno.
- Podemos empezar a desarrollar la compasión entendiendo que ser compasivo no significa aprobar el buen o mal comportamiento del otro, se trata de cómo podemos entender el sufrimiento de otros.
- La transformación personal es posible si se le dedica el tiempo necesario, así como dedicamos tiempo a hacer ejercicio, aprender una disciplina o a tocar algún instrumento.
- No debemos subestimar nuestra capacidad de cultivar la compasión por otros porque estaríamos limitando el poder lograr una sociedad mejor.
- La felicidad no es una sucesión de placeres sino una forma de ser. Desde pequeños podemos aprender a ser felices y buenos si se inculca que la felicidad nace y depende de nosotros mismos y no del entorno.
- La compasión y el altruismo deben ser entendidos e interiorizados como situaciones ganadoras tanto para quien los manifiesta como para quien los recibe.
- La felicidad egoísta esta destinada a fallar porque no somos seres independientes, todos estamos conectados con la naturaleza.
- El verdadero altruismo, que es ayudar a otros sin recibir nada a cambio sí existe y podemos desarrollarlo a través de la meditación.
Tras analizar por largos años el cerebro de Matthieu Ricard se ha podido determinar que la meditación, (que es la base de su teoría), podría ser no solo la base para ser mejores seres humanos sino el antídoto perfecto contra la depresión, la ira y el miedo. Los resultados fueron tan sorprendentes que en Abril de 2007 Ricard fue nombrado como el hombre más feliz del mundo.
Muchas teorías han surgido en los últimos años que asimilan sentimientos como la felicidad, el altruismo y la solidaridad como lecciones aprendidas y no biológicas. ¿Crees entonces que en nuestra mente se encuentre el potencial para ser más compasivos y felices?
____
Este es un contenido Copyleft (ↄ). Puedes reproducir este y cualquier otro contenido de nuestro blog y compartirlo en diferentes soportes (online, papel, etc.) siempre y cuando cites la fuente, con el enlace a la página principal del propio blog de Idealistas.
Desde mi trabajo como voluntaria ayudo a personas que no tienen acceso al sistema de salud en Nueva York traduciendo de inglés a español y vice versa eventos de salud gratuitos y gestionando actividades de divulgación. A su vez, coordino los medios sociales de la organización a la que sirvo.