Promover el bienestar de niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad, garantizando un entorno lleno de amor, contención y acompañamiento. Trabajamos con amor para restituir sus derechos vulnerados, favorecer su desarrollo integral y brindarles educación, juego y oportunidades que les permitan crecer con dignidad, esperanza y la posibilidad de soñar.
Recibimos con amor a bebés y niños que se encuentran bajo una medida de abrigo, dispuesta por la justicia, y que necesitan un lugar seguro para sanar y crecer.
Allí nos ocupamos de garantizar que tengan cubiertas todas sus necesidades básicas y afectivas.
No es solo un techo: es un espacio donde encuentran contención, cuidado y amor, fundamentales para reconstruir historias de vida muchas veces marcadas por el dolor y/o el abandono.
Contamos con un equipo profesional que acompaña de manera integral a cada niño, asegurando el acceso a controles médicos, acompañamiento psicológico y todas las herramientas necesarias para su bienestar.
En nuestras Casitas, cada historia encuentra una nueva oportunidad.