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La gratitud en todos los aspectos de la vida, incluyendo el laboral, nos ofrece múltiples beneficios. 

Tomarnos al menos 10 minutos cada día para agradecer, cambia por completo nuestra perspectiva y contribuye a favorecer nuestro bienestar emocional, mental e incluso físico: 

  • Impulsa el optimismo y reduce los pensamientos catastróficos.
  • Permite gestionar los niveles de estrés y reducir la ansiedad.
  • Ayuda a fortalecer los vínculos sociales y a desarrollar la empatía. 
  • Impulsa la creatividad, la productividad y el enfoque.
  • Ayuda a descansar mejor y a reducir ciertos malestares físicos.

Y si bien los beneficios son numerosos, no siempre es fácil saber por dónde, ni cómo comenzar a incorporar este hábito a nuestra vida, por eso, qué mejor que hacerlo en uno de los lugares en los cuales más horas pasamos a la semana: el trabajo.

En esta nota te compartimos 5 ideas para que empieces a incorporar la gratitud en tu espacio de trabajo de manera que consigas cultivar sentimientos de satisfacción y abundancia en tu vida y contagiarlos a todas las personas que te rodean.

1. Lleva un diario de gratitud

Busca un cuaderno o libreta que te guste y empieza a escribir en él - cada día - 5 cosas por las que estás agradecido/a, por ejemplo, "agradezco el trabajo que tengo", “agradezco hacer un trabajo con sentido que ayuda a otras personas y/o al medio ambiente” o “agradezco haber completado toda mi lista de pendientes para las 3 de la tarde”.

No hace falta que sean cosas enormes, lo importante es que definas un momento para escribir en tu diario y dejarlo fijo para volverlo hábito (por ejemplo, puedes destinar 5 minutos al final de tu jornada para escribir tu lista de agradecimientos ) así, poco a poco, irás notando cambios.

2. Vive el momento presente y disfruta de los pequeños detalles

No es ninguna novedad que vivimos un ritmo de vida tan acelerado que nos cuesta detenernos a disfrutar del momento presente. 

La gratitud, en cambio, nos invita a reconectar con lo que estamos viviendo y a centrar la mirada en los detalles más pequeños que - la mayoría de las veces - se nos escapan: esa charla que compartimos mientras nos servíamos una taza de café, la caminata bajo el sol a la hora del almuerzo, etc.

Intenta dejar atrás el piloto automático y aguzar lo más posible los sentidos para empezar a prestar atención plena a estos pequeños instantes de disfrute, gozo y felicidad que ya son parte de tu cotidianidad, pero que - por alguna razón - hoy están pasando desapercibidos.

3. Haz un uso más consciente de las redes sociales

Si bien estas plataformas nos muestran un fragmento muy pequeño de la vida de las demás personas, eso nos basta - en varias ocasiones - para sentir que nuestra vida no es igual de importante, interesante o divertida. 

Debido a sus propias lógicas de funcionamiento, las redes favorecen la comparación, generando un impacto negativo en nuestro estado de ánimo general. Para evitarlo, te compartimos algunos consejos:

  • Limita el tiempo de uso diario (puedes establecer un recordatorio en tu celular).
  • Elige a conciencia a quiénes sigues y por qué.
  • Deja de seguir cuentas que te provocan sentimientos negativos.
  • Recuerda que lo que ves refleja una parte muy pequeña de la realidad.
  • Comparte en redes contenidos inspiradores, historias positivas de personas que están poniendo su grano de arena para mejorar el mundo o mensajes alentadores para otras personas.

4. Expresa tu gratitud hacia los demás

¡La gratitud es mejor si se comparte! Busca contagiar esta práctica en tu ambiente de trabajo, agradeciendo a tu equipo cada vez que puedas (esto ayudará, no sólo a mejorar el ambiente, sino también a disminuir la competencia y a fortalecer la colaboración).

No tengas miedo, ni vergüenza de poner en palabras lo mucho que aprecias a las personas que te acompañan a diario y que hacen que tus días sean mucho mejores.

5. Haz un voluntariado

Es parte de la naturaleza humana sentirnos plenamente agradecidos cuando tenemos la oportunidad de hacer algo por alguien más y un voluntariado es una forma maravillosa de hacerlo.

Este tipo de experiencias, te ayudan a conectar con personas grandiosas, así como también que te permiten aplicar tus habilidades y talentos de una forma significativa para generar un impacto positivo en tu comunidad y en el mundo. 

Si estás buscando hacer voluntariado, visita nuestra plataforma para encontrar la oportunidad ideal para ti (encontrarás oportunidades de voluntariado en todo el mundo).

Comienza hoy a cultivar el hábito de la gratitud

Cuando haces de la gratitud un hábito, notas un cambio positivo en tu vida: empiezas a ser más consciente de todo lo bello que te rodea y desarrollas una mirada optimista ante el mundo. 

Esperamos que estos 5 consejos te inspiren para comenzar a cultivar el hábito de la gratitud en tu espacio de trabajo para luego extenderlo a los demás ámbitos de tu vida. 

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