¿Cómo evitar el agotamiento trabajando en causas sociales?

La pasión por cambiar el mundo es un poderoso motor que nos impulsa a dedicar nuestro tiempo a causas sociales. Trabajar en organizaciones con propósito o hacer activismo por ideales que nos apasionan puede ser increíblemente gratificante. Sin embargo, esta misma pasión puede convertirse en un arma de doble filo.

El compromiso profundo con causas sociales, a menudo conlleva el riesgo de desgaste emocional y físico. La urgencia de los problemas que enfrentamos y el deseo de ver cambios inmediatos pueden llevarnos al borde de la depresión o el agotamiento si no aprendemos a gestionar nuestra energía y recursos de manera efectiva.

En este artículo, exploraremos estrategias prácticas para mantener viva la llama del activismo sin desgastarnos en el proceso. Te compartiremos cómo reconocer las señales de alerta del burnout y, lo más importante, cómo equilibrar tu compromiso con el autocuidado.

#1 Reconoce las señales de alerta

El primer paso para evitar el agotamiento es aprender a identificar los signos tempranos del burnout. Presta atención a cualquiera de estos síntomas:

• Fatiga constante: Te sientes exhausto/a incluso después de descansar adecuadamente, como si el descanso no te recargara lo suficiente.
• Desconexión emocional: Sientes apatía y/o indiferencia por la causa por la que antes te apasionaba, o dudas sobre si tu trabajo realmente tiene un impacto significativo.
• Insomnio o problemas de sueño: Tienes dificultades para conciliar el sueño o te despiertas durante la noche con la mente saturada por preocupaciones.
• Irritabilidad: Reaccionas de forma exagerada ante pequeñas frustraciones. 
• Problemas físicos: Dolores de cabeza recurrentes, molestias digestivas u otros problemas físicos sin una causa clara pueden ser manifestaciones del estrés prolongado.

Si experimentas dos o más de estos síntomas de forma persistente, ¡es hora de tomar medidas! 

#2 Establece límites claros: tu escudo protector

La pasión por el cambio social puede difuminar las líneas entre el trabajo y la vida personal. Por eso es fundamental establecer límites saludables que te ayuden a desconectar y recuperar tu energía.

• Define horarios fijos: Establece un horario de trabajo que se ajuste a tus necesidades y respétalo. Sabemos que el activismo puede ser absorbente, pero poner un límite claro entre el trabajo y el descanso es vital para tu bienestar.
• Configura tu teléfono para silenciar notificaciones laborales fuera de horario: Usa las funciones de "No molestar" o "Modo descanso" de tu teléfono para silenciar correos o mensajes de trabajo. También puedes separar tus cuentas laborales y personales en diferentes aplicaciones o dispositivos.
• Marca el final de tu jornada: Crea un pequeño ritual de transición al terminar el día. Puede ser algo tan simple como una caminata corta, leer unas páginas de un libro o hacer una sesión de respiración profunda o meditación de 5 minutos. Esto le indicará a tu cerebro que es momento de relajarse y desconectar del trabajo.

#3 Crea una red de apoyo 

Cultivar una red de apoyo sólida es fundamental para tu bienestar. Busca activamente conexiones con colegas, amigas/os y familiares que compartan tu propósito y valores.

Tener personas con quienes hablar y desahogarte te ayudará a aliviar la presión emocional y a recargar energías cuando más lo necesites. Recuerda, no tienes que enfrentar todo solo/a. Ccompartir tus experiencias puede brindarte nuevas perspectivas y motivación.

#4 Establece metas realistas y celebra los pequeños logros

El cambio social es un proceso a largo plazo. Fija pequeñas metas alcanzables y celebra cada pasito, por pequeño que sea. Esto te ayudará a mantener la motivación y evitar la frustración. 

💡 Consejo práctico: Al final de cada semana o mes, anota tres logros de los que te sientas orgulloso/a, sin importar su tamaño. Esta práctica te ayudará a mantener una visión positiva de tu avance y a reforzar tu motivación a largo plazo.

#5 Practica el arte de decir “no”

En el activismo, es común sentir la presión de involucrarse en cada causa o iniciativa, pero es fundamental reconocer que no puedes con todo. Aprender a decir "no" de manera asertiva te permite enfocar tu energía en lo que realmente puedes y deseas hacer.

Decir "no", al contrario de ser un signo de fracaso o de falta de interés es una muestra de autocuidado y también de responsabilidad con el proyecto. Aprende a decir "no" para poder decir "sí" a lo que realmente importa.

#6 Desconéctate regularmente de las redes sociales

La exposición constante a problemas sociales y noticias negativas puede ser abrumadora. Aprende a desconectarte estratégicamente:

• Practica la "higiene informativa": Selecciona cuidadosamente tus fuentes de información y limita el tiempo que pasas consumiendo noticias.
• Designa un día a la semana como tu "día sin redes sociales": Usa ese tiempo para conectar con tus seres queridos, practicar deporte o cultivar algún hobbie que no esté relacionado con tu trabajo.
• Reserva un fin de semana libre de conexión: Una vez al mes, desconéctate completamente del correo y redes sociales durante todo un fin de semana. Observa cómo cambia tu estado de ánimo antes, durante y después de este descanso digital.

Consejo final

Aplicando estas estrategias, no sólo mejorarás tu calidad de vida, sino que también lograrás potenciar tu capacidad de impacto positivo en tu comunidad. Tu bienestar es el motor que impulsa tu compromiso con la causa, cuando te cuidas a ti misma/o, estás disponible para dar lo mejor de ti a los demás. ¡Esperamos que consigas poner en práctica estas estrategias!

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