Cómo pasar del preocuparse al OCUPARSE
Si existiese una poción mágica que nos ayudase a convertir nuestras buenas intenciones en acción, seguramente más de uno la tomaría. Lamentablemente ese no es el caso. Somos nosotros los que debemos empezar a dar el primer paso. En el camino podemos enfrentarnos a algunos obstáculos. ¿Cuáles son?
- Preocupación anticipada - en lugar de ayudarnos a avanzar nos mantiene inmóviles o en un espiral lenta e ineficiente.
- Ansiedad - un sentimiento desagradable que nos llena de tensión por un hecho que aún no ha ocurrido, se convierte en una barrera entre aquello que queremos hacer y la forma en cómo podemos lograrlo.
- Miedo - es una intensa tensión a un hecho en general anticipado que no nos permite seguir adelante con lo que queremos lograr. Está originado por la zozobra, lo desconocido y directamente relacionado con la preocupación.
- Pesimismo - es una negación a los posibles resultados positivos que pueda originar una situación determinada. Se tiende a ver todo con ojos negativos, lo que dificulta en gran medida la toma de acción, pues se siente que el resultado siempre será el mismo.
Entonces a pesar de lo mucho que una situación nos preocupe, a menudo decidimos no hacer nada por diferentes razones y esperamos a que de algún modo (casi milagroso) las cosas cambien. Aquí es cuando muchas veces surgen las excusas, para dar de cierto modo explicación o confort interno de que el no actuar, no es nuestra culpa (no tengo tiempo, dinero, necesito un compañero, por qué yo y no otro, etc)...
¿Cómo podemos pasar del preocuparnos al OCUPARNOS?
Te daremos algunas claves. No son infalibles. Su ingrediente principal eres tú.
* Básate en tus capacidad y habilidades, en lugar de pensar en lo que te falta, no tienes o lo difícil que será lograr lo que quieres.
* En ocasiones es común sentirnos que pequeños actos no contribuirán en nada a cambiar al mundo, pero recuerda que sí pueden cambiar vidas, y si logras cambiar una sola, solo por eso habrá valido la pena.
* La preocupación es un estado mental, como sus más fieles acompañantes: el miedo, la ansiedad y el pesimismo. Nadie puede manejar tu mente o tus sentimientos por ti, solo tú puedes hacerlo. En ti esta decidir el que sea tu mejor aliada o tu enemiga.
*Muchos dicen que es mejor arrepentirse de haber hecho algo que nunca haberlo hecho. Yo diría que nunca sabremos si algo realmente funcionaría o no si no lo intentamos. Podemos estar perdiendo más al no actuar que si decidimos hacerlo.
*No siempre conocemos el camino que debemos seguir con exactitud. Lo importante es saber a dónde queremos llegar.
* Una vez des el primer paso, este te servirá de eslabón para el siguiente, te dará motivación te demostrará que sí eres capaz de vencer tus miedos, ir más allá de tu comodidad y continuar adelante.
La preocupación es un estado mental que puede ser recurrente, una de las formas para combatirlo es enfrentándolo. ¿Qué es lo peor que puede pasar?
"La gente se queja mucho, pero se acobardan a la hora de actuar. Quieren que todo cambie, pero se niegan a cambiar" - Paulo Coelho.
___
Este es un contenido Copyleft (ↄ). Puedes reproducir este y cualquier otro contenido de nuestro blog y compartirlo en diferentes soportes (online, papel, etc.) siempre y cuando cites la fuente, con el enlace a la página principal del propio blog de Idealistas.
Desde mi trabajo como voluntaria ayudo a personas que no tienen acceso al sistema de salud en Nueva York traduciendo de inglés a español y vice versa eventos de salud gratuitos y gestionando actividades de divulgación. A su vez, coordino los medios sociales de la organización a la que sirvo.