¿A cuántos pasos estás de tu baño?

¿Te imaginas tu vida sin un baño? Una de cada tres personas en el mundo y más de seis millones en Argentina no tiene que imaginar, para ellos es el pan nuestro de cada día. Pero las repercusiones van mucho más de la incomodidad y la falta de higiene. Personas que viven en estas circunstancias tienen más posibilidades de enfermarse por no hablar de los obstáculos para el avance socioeconómico de comunidades bajo estas circunstancias. ¿qué hacer?

Los inicios...

Eso mismo se preguntó Matías Nicolini, quien un día convirtió en la problemática de falta de saneamiento, en uno de los motores de su vida. Matías acudía a diferentes comunidades carenciadas en labores de trabajo social. Cuando preguntaba ¿dónde está el baño? siempre le decían 'no tenemos' o, 'vete allá a dos cuadras y diles que vas de mi parte que te dejen usar su baño...'. Pero el problema iba más allá de la falta de baño. El propio Matías volvía de los asentamiento a veces con salpullidos en la piel, problemas de estómago... Si esto le pasaba a él por pasar unas horas allí, ¿cómo afectaba a los vecinos de la comunidades?

La necesidad no era menor, se percibía a gritos. Él, con otros cinco amigos más decidieron hacer algo. Cinco años después su proyecto, Módulo Sanitario, ha conseguido implementar 600 módulos sanitarios, en 8 provincias, con la participación de 1.500 voluntarios impactando a la vida de 15.000 personas.

El modelo de Módulo

El modelo de esta organización consiste en generar soluciones sanitarias modulares y de fácil colocación. Uno de sus modelos, adjunta el módulo sanitario a la vivienda de emergencia de TECHO (organización con la que normalmente trabajan y que construye estructuras básicas de vivienda). El módulo se anexa durante el fin de semana. Se abre la pared y se instala un inodoro, bachas con agua fría y caliente, ducha y una cloaca que va a un pozo ciego.

Detrás de este proceso, (quizás el que muestra un impacto más directo) hay horas y horas de trabajo de los integrantes de la organización y los voluntarios que hacen un estudio exhaustivo de diferentes comunidades con necesidad urgente de este tipo de intervenciones. El trabajo de campo desde que se identifica una comunidad o alguna organización se acerca a Módulo para trabajar en conjunto en un espacio, ronda los cuatro meses. De ahí, si se determina que un número de familias van a recibir un módulo, se organiza la construcción. 

Y es así que estos cinco años de recorrido comienzan a dar resultados al medio plazo. Ya puede verse cómo el contar con estos módulos sanitarios ha afectado en positivo o no a las comunidades. "Se están llevando ya indagaciones exhaustivas para conocer cosas como ¿ha mejorado la salud de las personas?, ¿su forma de dormir?, ¿sus hábitos alimentarios porque ahora pueden lavar de forma adecuada los alimentos que lo requieran?, ¿existen y en qué media problemas en la piel, estomacales, de otras enfermedades...? En definitiva: ¿cómo un módulo ha impactado en positivo la calidad de vida de estas personas?", nos cuenta Agustina Aguirre, otra de las personas integrantes de la organización.

Este video nos da una idea del antes y el después en la vida de estas familias:

Retomando manos para seguir avanzando

Y en todo esto andan sin paran de organizar construcciones. Los voluntarios bajaron en la pandemia pero comienzan a recuperar el ritmo, tanto de gente involucrada como de la aspiración de construir.

Este año quieren alcanzar las 200 construcciones y lo harán mediante donaciones recurrentes, colaboraciones de empresas, voluntarios, etc. Siguen generando conciencia y dan charlas para acercar la problemática a esas personas que estén pensando en colaborar de alguna forma. A los que asisten les preguntan en primera instancia, ¿a cuántos pasos estás de tu baño? La mayoría no tenemos que desplazarnos demasiado, pero millones de personas alrededor del mundo no tienen uno o el que tiene y comparten con otros está en pésimas condiciones y fuera, a veces lejos de su casa.

En definitiva, no dejan de soñar con seguir generando un impacto directo y tangible en la vida de las personas y haciéndolo Agustina menciona como: "Nos infla en pecho, le estamos transformando la calidad de vida a una familia. Sentimos pasión, alegría, sensibilización, ¡un orgullo! Nos damos una mano entre todos. Les ayudamos a despegar un poquito. Y nosotros nos llevarnos el aprendizaje y humildad de ser partícipes en este momento de la vida de estas personas"

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#IntenciónAcción - Si te gustó esta historia y quieres saber cómo colaborar, aquí algunas ideas:

• Para empresas: existen varias maneras en que puedes hacer tu diferencia como empresa. Conoce más.
• Para personas: dona puntualmente o de forma recurrente para que que muchos niños y niñas tengan una vida más saludable y mayores oportunidades de cara al futuro. Quiero donar.
• Para voluntarios: tu aporte cambia realidades. Ya puedes apuntarte para las siguientes construcciones aquí.
• Recuerda que puedes buscar otras Oportunidades de Voluntariado aquí.

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